Acebes defiende que se convocara a las bases para protestar contra el PSOE
El secretario general del PP, Ángel Acebes, ha asegurado hoy que la dirección del PP "apoya los términos de la carta que convoca a los militantes del PP para apoyar a las víctimas del terrorismo", y que movilizaba a sus afiliados de Madrid para que acudieran a la manifestación del sábado para culpar al Gobierno socialista de que “los asesinos etarras” salieran de la cárcel.
El PP movilizó a sus afiliados de Madrid para que acudieran a la manifestación del pasado sábado convocada por las víctimas del terrorismo mediante una carta en la que se culpaba al Gobierno socialista de las excarcelaciones de presos etarras. Algo que Acebes "Goebbels" justifica sin rubor.
El secretario de Comunicación del PP de Madrid, Juan José Güemes, ha afirmado este martes que "se ha producido un gravísimo atentado" contra los derechos constitucionales de dos ciudadanos que han sido detenidos "irregularmente" por "el mero hecho" de ser afiliados al PP y haber participado en una manifestación. Güemes ha denunciado el "uso partidista de los cuerpos y fuerzas de Seguridad del Estado, algo que los españoles no veíamos desde la dictadura franquista y que creíamos haber dejado atrás". ¿¿Detenciones que no se veían desde la dictadura?? En 'La Mirada Crítica' de Telecinco, este miércoles, Güemes no sólo ha insistido en este argumento: no ve nada malo en la comunicación hecha desde el PP de Madrid y denunciada hoy por 'El País' y 'El Periódico' y por supuesto no ha efectuado disculpa alguna. Ha dado evasivas, no condena la carta y desmiente a 'El País', algo imposible puesto que este medio reproduce la carta en sus páginas: no hay tergiversación posible.
Todo indica que la concentración del sábado estaba politizada desde un principio por el comunicado del PP alentando, más bien calentando a sus bases a acudir con el ánimo de protestar contra el Gobierno, algo que no estaba ni de lejos en el motivo de la concentración. No fue espontáneo sino premeditado. Parece claro que hay sectores radicales dentro del PP en desacuerdo con el pacto por el modelo de Estado y contra el Plan Ibarretxe que Rajoy acordó con el Presidente Zapatero.
Hoy Esperanza Aguirre ha dicho que "esto ya es la Gestapo". En vez de eso, debería desautorizar al autor de la carta, el secretario de área de distritos del PP-Madrid, Ángel Garrido, hombre de su confianza, y a la persona que se cita en la misma, el secretario general del PP en Madrid, Francisco Granados, que reconoció haber dado instrucciones para que sus militantes supieran que el partido apoyaba la manifestación, aunque los términos en los que se transmitió la orden no fueron redactados por él. No era el sitio para hacer política, y este hecho supone una vulneración clara del Pacto Antiterrorista suscrito entre PP y PSOE, ya que se usa el terrorismo y a sus víctimas como arma electoral.
El diario de Ansón, 'La Razón', da la portada de hoy a unas declaraciones del portavoz de Batasuna Joseba Permach, en las que dice que hay 'contactos' informales con miembros del PSOE, algo que el secretario de organización socialista José Blanco se ha encargado de negar y, de ser cierto, desautorizar, en Telecinco. 'La Razón' da crédito y credibilidad a un procesado por pertenencia a banda armada, según acaba de ordenar el juez Baltasar Garzón. Bravo.
El PP movilizó a sus afiliados de Madrid para que acudieran a la manifestación del pasado sábado convocada por las víctimas del terrorismo mediante una carta en la que se culpaba al Gobierno socialista de las excarcelaciones de presos etarras. Algo que Acebes "Goebbels" justifica sin rubor.
El secretario de Comunicación del PP de Madrid, Juan José Güemes, ha afirmado este martes que "se ha producido un gravísimo atentado" contra los derechos constitucionales de dos ciudadanos que han sido detenidos "irregularmente" por "el mero hecho" de ser afiliados al PP y haber participado en una manifestación. Güemes ha denunciado el "uso partidista de los cuerpos y fuerzas de Seguridad del Estado, algo que los españoles no veíamos desde la dictadura franquista y que creíamos haber dejado atrás". ¿¿Detenciones que no se veían desde la dictadura?? En 'La Mirada Crítica' de Telecinco, este miércoles, Güemes no sólo ha insistido en este argumento: no ve nada malo en la comunicación hecha desde el PP de Madrid y denunciada hoy por 'El País' y 'El Periódico' y por supuesto no ha efectuado disculpa alguna. Ha dado evasivas, no condena la carta y desmiente a 'El País', algo imposible puesto que este medio reproduce la carta en sus páginas: no hay tergiversación posible.
Todo indica que la concentración del sábado estaba politizada desde un principio por el comunicado del PP alentando, más bien calentando a sus bases a acudir con el ánimo de protestar contra el Gobierno, algo que no estaba ni de lejos en el motivo de la concentración. No fue espontáneo sino premeditado. Parece claro que hay sectores radicales dentro del PP en desacuerdo con el pacto por el modelo de Estado y contra el Plan Ibarretxe que Rajoy acordó con el Presidente Zapatero.
Hoy Esperanza Aguirre ha dicho que "esto ya es la Gestapo". En vez de eso, debería desautorizar al autor de la carta, el secretario de área de distritos del PP-Madrid, Ángel Garrido, hombre de su confianza, y a la persona que se cita en la misma, el secretario general del PP en Madrid, Francisco Granados, que reconoció haber dado instrucciones para que sus militantes supieran que el partido apoyaba la manifestación, aunque los términos en los que se transmitió la orden no fueron redactados por él. No era el sitio para hacer política, y este hecho supone una vulneración clara del Pacto Antiterrorista suscrito entre PP y PSOE, ya que se usa el terrorismo y a sus víctimas como arma electoral.
El diario de Ansón, 'La Razón', da la portada de hoy a unas declaraciones del portavoz de Batasuna Joseba Permach, en las que dice que hay 'contactos' informales con miembros del PSOE, algo que el secretario de organización socialista José Blanco se ha encargado de negar y, de ser cierto, desautorizar, en Telecinco. 'La Razón' da crédito y credibilidad a un procesado por pertenencia a banda armada, según acaba de ordenar el juez Baltasar Garzón. Bravo.
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