¿Hundimiento del Grupo Prisa?
¿Qué sentido tiene que el diario El País publicase hace unos días, incluyendo sólo como fuente la parte demandante, y omitiendo que no hubo juicio ni debate porque fue sentencia de conformidad, la condena por descargas en un juzgado de La Rioja diciendo que databa de abril, cuando en realidad era de enero, coincidiendo con el nombramiento de Ángeles González-Sinde como ministra de Cultura? ¿Y que desde entonces sigan con noticias de ese tipo como una del día 17, llena de mentiras, aludiendo al posible final de las descargas gratis, firmada por una periodista que ha estado trabajando para el Gobierno? ¿O que el día 19, el mismo en el que publicaban una entrevista con la ministra, sacaran una noticia firmada por el mismo que el día 10 hacía la referente al juicio de La Rioja, diciendo que las páginas web que permitan descargas serán perseguidas en España? ¿O que hablen de "Golpe contra un gran portal de descargas" por la sentencia en primera instancia contra Pirate Bay, cuando es una página sueca juzgada por la justicia de su propio país, es decir, que no sirve para ser trasladada a España?
¿Recibe El País órdenes de Moncloa para hacerle el juego a González-Sinde? ¿Quiere el Grupo Prisa, editor de dicho periódico, hacer méritos ahora que parece que la niña de los ojos de ZP es Mediapro, por el tema del fútbol en abierto y la TDT de pago, en pleno descalabro de Digital +, para la que no encuentran comprador ni a tiros? Raro es el día que AS y El Larguero (Ser) no cargan contra la Liga de Fútbol Profesional o la Federación por permitir a La Sexta incumplir los contratos y dar los partidos en abierto. Lamento que les perjudique y entiendo que deban defender sus intereses, pero como lector y oyente me fastidia que estén día sí y día también con la misma matraca. Entre eso y que en El Larguero sólo entrevistan a amigos de De la Morena (Etoo, Iniesta, Fernando Alonso), pues he dejado de escuchar el programa.
También parece que al PSOE le debe ir fatal en las encuestas para las elecciones europeas para que la Ser, también del Grupo Prisa, tenga que resucitar el fantasma de Aznar, porque si no, no se entiende que el programa Hora 25 haya considerado como noticia más importante y de portada a una a la que los demás medios no han dado relevancia alguna: una conferencia sobre economía que el ex presidente del Gobierno ha ofrecido a cargo de la FAES. Por mucho que dicha fundación sea la "factoría de ideas" del PP, el hecho de que Aznar ya no sea nadie y ande peleado con Rajoy me inclina a pensar que el partido del cual es presidente de honor no le va a hacer ni puñetero caso. Aznar pide una reforma del mercado laboral que lo flexibilice, y critica el excesivo número de personas que cobran subsidio. ¿Qué pienso? Lo dicho, que el PSOE debe estar fatal en las intenciones de voto y la Ser saca el fantasma de Aznar para que la gente se asuste creyendo que vuelve o que influye algo y así restar voto al PP. Este señor ya no pinta nada, ¿por qué le ha dado la Ser tanta importancia a lo que ha dicho, hasta el punto de abrir con ello Hora 25? Es absurdo.
Hasta el anuncio de reducción de publicidad en TVE puede ser un guiño del Gobierno a las privadas. Muy contentos en el Ente no están, desde luego, aunque este lunes haya aparecido De la Vega en "Los Desayunos" y en un encuentro con internautas tratando de aplacar los ánimos. El PP no anda bien, corrupción aparte, pero puede ganar, sin apenas hacer propuestas, por suicidio del contrario.
Por lo demás, el Grupo Prisa debe estar fatal. En su número de marzo, un artículo de Le Monde Diplomatique en español hablaba de la mala situación económica del grupo, que tuvo que cerrar Localia y vender su sede de Gran Vía 32, así como la de Barcelona, a la empresa Longshore, para reducir su deuda, que algunas fuentes cifran en 5.000 millones de euros, pese a que usaran las páginas de El País para hablar de beneficios. Las acciones en Bolsa apenas remontan los dos euros mientras otras empresas como Telecinco o Antena 3 tienen subidas superiores al 30 por ciento. Tras la publicación de dicho artículo, el departamento de publicidad de El País transmitió a Le Monde Diplomatique que dejarían de publicar el anuncio que ésta última venía insertando en el suplemento Babelia los últimos cuatro años.
Parece que las noticias son todo menos halagüeñas: les han llegado a cortar el teléfono, sus títulos siguen sin levantar cabeza y han emprendido una drástica política de recorte de gastos. En enero se anunció la integración de las redacciones impresa y digital de El País, una reorganización interna que se establecía como un pilar de cambio pero que sin duda obedece también a razones económicas. Hasta se temen un ERE y algunos dejan el barco viéndole las orejas al lobo. Y eso incluye que tengan que asumir servicios que tenían externalizados a otras empresas del grupo. Éste es el contenido de un correo electrónico que he recibido este lunes como suscriptor de algunos servicios de la web de El País, como la sección "Yo Periodista":
O sea que muy bien no les debe ir. Recientemente subió el precio del diario diez céntimos, pasando de 1,10 a 1,20 euros por ejemplar en quiosco de lunes a sábado. Otro síntoma de dicha crisis ha sido la supresión, efectiva a partir del domingo 5 de abril, del suplemento "Pequeño País". Los motivos de la decisión los explicaba la misma defensora del lector el domingo, haciéndose eco de la multitud de quejas recibidas. El anuncio de la supresión se hizo prácticamente de tapadillo. No son formas. Sin embargo, como dicen en Extremadura Progresista, la defensora "no deja pasar la oportunidad para cargar contra los soportes emergentes y competidores. “Y eso ocurre al tiempo que la cultura de la gratuidad se extiende de la mano de Internet, lo que puede acabar afectando también a la calidad”. Y a su independencia. Para la empleada de Prisa, lo mejor para el cliente es pagar". Ojo a ese ataque a "la cultura de la gratuidad" que "se extiende de la mano de Internet", que enlaza perfectamente con los ataques que, a través de sus páginas, viene lanzando El País contra las descargas en la red y a los que me refería en el primer párrafo de este post.
Este lunes, Prisa presentaba su plan de viabilidad ante los inversores. ¿Cómo habrá ido la cosa?
Seguiremos informando, en mi caso con pesar pues soy un comprador asiduo de El País, y oyente de la Ser, y no me gusta en absoluto cómo se están comportando en estas últimas semanas. Y el colmo hoy, resucitando a Aznar para ver si en Moncloa nos hacen un favorcillo o nos dan una licencia de TDT de pago como a La Sexta. Bueno, sólo la han pedido, pero algunos ya dan por sentado que se la van a dar.
¿Recibe El País órdenes de Moncloa para hacerle el juego a González-Sinde? ¿Quiere el Grupo Prisa, editor de dicho periódico, hacer méritos ahora que parece que la niña de los ojos de ZP es Mediapro, por el tema del fútbol en abierto y la TDT de pago, en pleno descalabro de Digital +, para la que no encuentran comprador ni a tiros? Raro es el día que AS y El Larguero (Ser) no cargan contra la Liga de Fútbol Profesional o la Federación por permitir a La Sexta incumplir los contratos y dar los partidos en abierto. Lamento que les perjudique y entiendo que deban defender sus intereses, pero como lector y oyente me fastidia que estén día sí y día también con la misma matraca. Entre eso y que en El Larguero sólo entrevistan a amigos de De la Morena (Etoo, Iniesta, Fernando Alonso), pues he dejado de escuchar el programa.
También parece que al PSOE le debe ir fatal en las encuestas para las elecciones europeas para que la Ser, también del Grupo Prisa, tenga que resucitar el fantasma de Aznar, porque si no, no se entiende que el programa Hora 25 haya considerado como noticia más importante y de portada a una a la que los demás medios no han dado relevancia alguna: una conferencia sobre economía que el ex presidente del Gobierno ha ofrecido a cargo de la FAES. Por mucho que dicha fundación sea la "factoría de ideas" del PP, el hecho de que Aznar ya no sea nadie y ande peleado con Rajoy me inclina a pensar que el partido del cual es presidente de honor no le va a hacer ni puñetero caso. Aznar pide una reforma del mercado laboral que lo flexibilice, y critica el excesivo número de personas que cobran subsidio. ¿Qué pienso? Lo dicho, que el PSOE debe estar fatal en las intenciones de voto y la Ser saca el fantasma de Aznar para que la gente se asuste creyendo que vuelve o que influye algo y así restar voto al PP. Este señor ya no pinta nada, ¿por qué le ha dado la Ser tanta importancia a lo que ha dicho, hasta el punto de abrir con ello Hora 25? Es absurdo.
Hasta el anuncio de reducción de publicidad en TVE puede ser un guiño del Gobierno a las privadas. Muy contentos en el Ente no están, desde luego, aunque este lunes haya aparecido De la Vega en "Los Desayunos" y en un encuentro con internautas tratando de aplacar los ánimos. El PP no anda bien, corrupción aparte, pero puede ganar, sin apenas hacer propuestas, por suicidio del contrario.
Por lo demás, el Grupo Prisa debe estar fatal. En su número de marzo, un artículo de Le Monde Diplomatique en español hablaba de la mala situación económica del grupo, que tuvo que cerrar Localia y vender su sede de Gran Vía 32, así como la de Barcelona, a la empresa Longshore, para reducir su deuda, que algunas fuentes cifran en 5.000 millones de euros, pese a que usaran las páginas de El País para hablar de beneficios. Las acciones en Bolsa apenas remontan los dos euros mientras otras empresas como Telecinco o Antena 3 tienen subidas superiores al 30 por ciento. Tras la publicación de dicho artículo, el departamento de publicidad de El País transmitió a Le Monde Diplomatique que dejarían de publicar el anuncio que ésta última venía insertando en el suplemento Babelia los últimos cuatro años.
Parece que las noticias son todo menos halagüeñas: les han llegado a cortar el teléfono, sus títulos siguen sin levantar cabeza y han emprendido una drástica política de recorte de gastos. En enero se anunció la integración de las redacciones impresa y digital de El País, una reorganización interna que se establecía como un pilar de cambio pero que sin duda obedece también a razones económicas. Hasta se temen un ERE y algunos dejan el barco viéndole las orejas al lobo. Y eso incluye que tengan que asumir servicios que tenían externalizados a otras empresas del grupo. Éste es el contenido de un correo electrónico que he recibido este lunes como suscriptor de algunos servicios de la web de El País, como la sección "Yo Periodista":
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O sea que muy bien no les debe ir. Recientemente subió el precio del diario diez céntimos, pasando de 1,10 a 1,20 euros por ejemplar en quiosco de lunes a sábado. Otro síntoma de dicha crisis ha sido la supresión, efectiva a partir del domingo 5 de abril, del suplemento "Pequeño País". Los motivos de la decisión los explicaba la misma defensora del lector el domingo, haciéndose eco de la multitud de quejas recibidas. El anuncio de la supresión se hizo prácticamente de tapadillo. No son formas. Sin embargo, como dicen en Extremadura Progresista, la defensora "no deja pasar la oportunidad para cargar contra los soportes emergentes y competidores. “Y eso ocurre al tiempo que la cultura de la gratuidad se extiende de la mano de Internet, lo que puede acabar afectando también a la calidad”. Y a su independencia. Para la empleada de Prisa, lo mejor para el cliente es pagar". Ojo a ese ataque a "la cultura de la gratuidad" que "se extiende de la mano de Internet", que enlaza perfectamente con los ataques que, a través de sus páginas, viene lanzando El País contra las descargas en la red y a los que me refería en el primer párrafo de este post.
Este lunes, Prisa presentaba su plan de viabilidad ante los inversores. ¿Cómo habrá ido la cosa?
Seguiremos informando, en mi caso con pesar pues soy un comprador asiduo de El País, y oyente de la Ser, y no me gusta en absoluto cómo se están comportando en estas últimas semanas. Y el colmo hoy, resucitando a Aznar para ver si en Moncloa nos hacen un favorcillo o nos dan una licencia de TDT de pago como a La Sexta. Bueno, sólo la han pedido, pero algunos ya dan por sentado que se la van a dar.
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