El obispo en TVE
No me gusta hablar de las declaraciones polémicas y escándalos que salpican de cuando en cuando a la Iglesia Católica. Debo decir que fui bautizado e hice la Primera Comunión, pero cuando tuve más conciencia de que, aparte de creer o no en la existencia de un ser superior, con lo que no estaba de acuerdo era con el proceder y las actitudes y pensamientos de los miembros y portavoces de esta religión, apostaté. Y considero desde hace bastante que dar pábulo, conceder hueco, a esas declaraciones y hechos, no debía hacerlo. Allá quien decida hacer caso de lo que dicen esos señores. En todo caso, sí que denuncio de vez en cuando las subvenciones públicas que recibe la Iglesia Católica en España. En los Presupuestos que acaba de presentar el Gobierno, recibirá 159 millones de euros vía IRPF. Como también que los cargos públicos encabecen las procesiones, o juren sobre la Biblia o con un crucifijo delante. También me gustaría la supresión del Concordato. Creo que las religiones (todas) se d