Menudo día para dejar de fumar...
Siempre que uno fume, claro está. A porrón: El Parlamento Vasco aprueba el proyecto de reforma del estatuto (Plan Ibarretxe), con tres votos favorables de la antigua Batasuna. El Consejo de Ministros ha dado mucho de sí: aprobado el nuevo Reglamento de la Ley de Extranjería, presentada la nueva Directiva de Defensa Nacional, se admite finalmente la cláusula de revisión del salario mínimo para apaciguar a los sindicatos, se aprueba el proyecto de ley que regula los matrimonios entre homosexuales y en televisión se adelanta el apagón tecnológico, se reforma la ley de televisiones privadas con carácter urgente y las privadas podrán emitir el año que viene en digital, con 22 nuevos canales en abierto: Vocento logra la autorización para tener accionariado en una cadena analógica (Telecinco) y otra digital (Net TV, con licencia desde 2000 junto con Veo TV, de El Mundo y Recoletos). Castilla y León inicia su batalla "jurídica y política" por el Archivo de la Guerra Civil de Salamanca, el Real Madrid cambia de entrenador, Simon Peres será "número 2" del gobierno israelí... ¡Menos mal que no esperaron a este viernes 31, porque mañana no hay periódico y hubiera sido una faena!
Lo que queda fuera de todo análisis es la tragedia de Asia: 125.000 fallecidos, y siguiendo. Sólo en Indonesia se cuentan 80.000 víctimas. Más unos 5 millones de desplazados, gente que lo ha perdido todo. Más la ruina económica para unos países que han perdido sus dos modos de subsistencia: el turismo (las instalaciones hoteleras han quedado inservibles) y la pesca (las olas se han llevado flotas enteras, de hasta 400 pescadores).
Aún hay que retirar más escombros, vehículos y toneladas de barro bajo las que es seguro que aparecerán cientos de cadáveres más que sumar a la lista. Si a algo se le puede aplicar la definición de "tragedia de proporciones bíblicas", sin duda es a este hecho que marca el cambio de año de forma absolutamente desgraciada. Como desgraciados son los bancos y cajas que cobran comisión en las cuentas de donación a las ONGs. Como rácana y miserable es la actitud de EEUU; por mucho que Bush diga que es el país que más dinero da para ayudas cada año, y que 35 millones de dólares es mucho, si lo comparamos con las cifras que suele mover ese país, la cantidad resulta ser una miseria. Hasta España sola ha dado más: el Gobierno ha aprobado una partida de 50 millones de euros. En clave local, han aparecido vivos dos españoles, mientras otros once siguen desaparecidos.
Lo que queda fuera de todo análisis es la tragedia de Asia: 125.000 fallecidos, y siguiendo. Sólo en Indonesia se cuentan 80.000 víctimas. Más unos 5 millones de desplazados, gente que lo ha perdido todo. Más la ruina económica para unos países que han perdido sus dos modos de subsistencia: el turismo (las instalaciones hoteleras han quedado inservibles) y la pesca (las olas se han llevado flotas enteras, de hasta 400 pescadores).
Aún hay que retirar más escombros, vehículos y toneladas de barro bajo las que es seguro que aparecerán cientos de cadáveres más que sumar a la lista. Si a algo se le puede aplicar la definición de "tragedia de proporciones bíblicas", sin duda es a este hecho que marca el cambio de año de forma absolutamente desgraciada. Como desgraciados son los bancos y cajas que cobran comisión en las cuentas de donación a las ONGs. Como rácana y miserable es la actitud de EEUU; por mucho que Bush diga que es el país que más dinero da para ayudas cada año, y que 35 millones de dólares es mucho, si lo comparamos con las cifras que suele mover ese país, la cantidad resulta ser una miseria. Hasta España sola ha dado más: el Gobierno ha aprobado una partida de 50 millones de euros. En clave local, han aparecido vivos dos españoles, mientras otros once siguen desaparecidos.
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